lunes, 14 de abril de 2008




No entendía tus silencios hasta que protegí los míos, no aceptaba tu irreverencia hasta que me miré de lejos, no transaba tus secretos hasta que resguardé los míos, no compartía tus vaivenes hasta que te negué los míos.
Nunca indagaste en mis locuras, mis pausas, mis señuelos. Te quedabas allí, dando vueltas, apareciendo cuando me sentía más débil, salvándome, siempre salvándome y no decías nada.
Sabes, nunca agradecí ese respeto, nunca lo hice porque no tomé distancia,,,,,,y hoy estás más cerca, sin embargo soy capaz de verte, de verte de lejos y lo que veo me gusta.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que hermosa capacidad de mirar desde la ventana hacia ti y descubrir que cada uno es un universo irrepetible.
Hermosas palabras y que bien se debe sentir quien las recibe
Un abrazo
Pablo

A moonclad reflection dijo...

Hola, prema!
Vine a preguntarte de que te gustaria que fuera el poema que te vaya a dedicar...te lo voy a escribir expresamente...decime como te gustaria...si? escribime a
amooncladreflection@hotmail.com
besos, prema!