viernes, 4 de julio de 2008




Estoy en Iquique, una ciudad tan distinta a la mía, una ciudad llena de matices vivos, al despertar veo el mar como la prolongación corriente de esta tierra, veo cerros enormes y orgullosos que protegen como leones furiosos este escenario cálido, en que el oleaje es el sonido de la calle, pero sobre todo esta ciudad me ha regalado certezas, certezas que sólo son posibles cuando el mar te muestra su calma sin esconder la furia de sus intenciones. Estar lejos de casa rompe mis esquemas porque las preguntas se hacen con total libertad y no hay una ventana que cierre respuestas, pues no hay una línea en este océano que me diga que hasta allí puedo llegar. Esas preguntas surgen tan valientes como las respuestas que recién empiezo a regalarme. Este viaje ha sido especial, lo sé hoy y lo sabré con más certeza cuando ya no alcance a escuchar la abundancia del enorme azul, el que he hecho mío también.
Estar lejos de casa me ha sanado un poco, estar lejos de casa me ha hecho despedirme de la Soledad que se mecía entre lo cotidiano y lo trivial. Estar lejos de casa me ha regalado a una Soledad que extrañaba.

5 comentarios:

Daniela dijo...

Por eso, por esa sensación de encontrarse en una exquisita complicidad con uno mismo, por esa sensación de que todas las direcciones son posibles, pues como no hay donde llegar, tampoco hay como perderse, por los colores, los aromas, las formas de la ciudad, así mismo tus colores, y tus formas toman un nuevo impetu,...por todo ello, mi mayor vocación, seguirá siendo ser viajera...disfruta prima, disfruta cada rincón

Anónimo dijo...

no lleves maletas, no cargues mochilas, no dejes de volar, no dejes de sonreír con esa capacidad de borrar sombras cada vez que sonríes.
cariños
Pablo

yorkperry dijo...

Bienvenida, tanto tiempo lejos... =-)

Sese dijo...

Espero que la Soledad que extrañas sea la Soledad que deseas.

El mar, pone límites a lo cotidiano y abre las puertas a las fantasías y a los sueños. No dejes de mirarlo.

Petonets

Víctor(H) dijo...

Es bravo Iquique! Disfrútalo. Hay mucho vértigo por allá, partiendo por esa maldita península que une cavancha con playa brava, uff!! Terrible, mejor ni me acuerdo.

Saludos,