Cuando el frío asecha, y el mala clase lo disimula con un solcito tenue, pero brillante que asoma por el ventanal y entonces uno salta de la cama con la ilusión de que ese menudo solcito entrará directo a los huesos y hará más fácil la rutina del levantarse….entonces el mala gente da su mejor coletazo y hace tiritar el alma,,,,uno camina rapidito, dando saltos de conejo, buscando la primera cosa de lana con cuello y calcetines, que sean 3 por favor, directo a la cocina a encender la cafetera, de vuelta con los mismos saltitos al baño,,,baño con baldosas, helado, blanco y por supuesto por donde no entra una gota de ese sol mentiroso.
El café está listo, entonces fuera un par de calcetines,,,,el calor de la garganta tiene conexión directa con los pies, pero falta el torso y ahí no hay posibilidad de retroceder. Envalentonada me saco la lana del cuerpo, sigo con mis saltos de conejo y entro al baño de puntillas. Me miro al espejo y el agua fría es la única posibilidad de reinventar esta cara de cordero degollado.
Esta historia, este pequeño pedazo de rutina tiene su razón de ser y es que me voy a Iquique, capital de la primera región de Chile, donde el clima de seguro me obligará a sacarme los calcetines y la lana del cuerpo y un café será necesario sólo por costumbre y no para hacer conexión con mis pies, que juro, no estarán helados…..el sol no será mentiroso, sino real y el mar, que será lo primero que vea al despertar, me avisará que el agua, aunque fría, tendrá otro sentido y sobre todo tendrá un bello horizonte.
Eso es solo para envidia de los sureños…que va, me tocaba a mí
El café está listo, entonces fuera un par de calcetines,,,,el calor de la garganta tiene conexión directa con los pies, pero falta el torso y ahí no hay posibilidad de retroceder. Envalentonada me saco la lana del cuerpo, sigo con mis saltos de conejo y entro al baño de puntillas. Me miro al espejo y el agua fría es la única posibilidad de reinventar esta cara de cordero degollado.
Esta historia, este pequeño pedazo de rutina tiene su razón de ser y es que me voy a Iquique, capital de la primera región de Chile, donde el clima de seguro me obligará a sacarme los calcetines y la lana del cuerpo y un café será necesario sólo por costumbre y no para hacer conexión con mis pies, que juro, no estarán helados…..el sol no será mentiroso, sino real y el mar, que será lo primero que vea al despertar, me avisará que el agua, aunque fría, tendrá otro sentido y sobre todo tendrá un bello horizonte.
Eso es solo para envidia de los sureños…que va, me tocaba a mí
3 comentarios:
Felicidades
La última vez que fui al Norte,
El Río Norte se llevó mis sueños engullendo mi cuaderno de notas,
El Mar Norte ahogó mi piel inundándome de salitre,
La Cordillera Norte embargó el dolor de mi mirada suprimiendo el horizonte
Si hasta…
El Perro Norte se atrevió con mi sombra comiéndose el viejo sombrero
Más ¡Qué no daría yo! por conquistar el Abrigo del Norte
(Un Astur que perdió el Norte)
Buen Viaje
Gracias Gonzalo,,,traeré fruta de la vid.
Lanzarote: el norte siempre se encuentra, el punto es conocer primero el sur
Publicar un comentario